CIUDAD DE MÉXICO, 14FEBRERO2019.- La activista Samantha Flores, ofrecio conferencia de prensa para dar detalles sobre el evento para recaudar fondos para el albergue "Vida Alegre" que ayuda a adultos mayores de la comunidad LGBTTTIQ en situación vulnerable. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 14FEBRERO2019.- La activista Samantha Flores, ofrecio conferencia de prensa para dar detalles sobre el evento para recaudar fondos para el albergue "Vida Alegre" que ayuda a adultos mayores de la comunidad LGBTTTIQ en situación vulnerable. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. Patricia Canon Veyro, 56 años, asistente desde que inicio el proyecto. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. En la imagen el padre Vince Schwann. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. En la imagen Jesús León. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. En la Imagen Samanta Flores. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. En la Imagen Jesús, el padre Vince y Samanta Flores. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- El padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Patricia, durante una sesión de terapia espiritual. “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM

CIUDAD DE MÉXICO, 27JULIO2018.- “Vida Alegre”, es un refugio gratuito para adultos mayores LGBTTTQI; el primero de su tipo en México. Samanta Flores, una activista transgénero de 86 años inicio el proyecto en mayo de este año -después de una extensa campaña a través de internet para recolectar fondos- pero quienes operan el lugar son el padre Vince Schwann de la comunidad de San Bonifacio y Jesús León, voluntario desde que inicio el proyecto. El lugar cuenta con dos habitaciones las cuales operan de manera permanente como centro de apoyo psicológico; posee computadoras con servicio a internet, una pantalla para la exhibición de películas, libros donados, entre otros. El padre se encarga de las terapias espirituales, mientras Jesús da clases de computación. Este espacio ubicado a tan solo un par de cuadras del metro Xola; pese la afluencia de gente desde temprana hora, pocos son los que se animan a venir a este espacio de inclusión, Samanta culpa a la polarización que existe aún sobre estos temas. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM