El trabajo es detallado, como cada una de las artesanías en las que trabajaban cuando inicio el año. Cristina, una de las hermanas de Aurora, esta esperando a su primer hijo y también es parte del proyecto familiar, ella es una de las bordadoras.

El trabajo es detallado, como cada una de las artesanías en las que trabajaban cuando inicio el año. Cristina, una de las hermanas de Aurora, esta esperando a su primer hijo y también es parte del proyecto familiar, ella es una de las bordadoras.

El trabajo es detallado, como cada una de las artesanías en las que trabajaban cuando inicio el año. Cristina, una de las hermanas de Aurora, esta esperando a su primer hijo y también es parte del proyecto familiar, ella es una de las bordadoras.

Para poder venderlos a otros países, la familia López cose una segunda tela detrás del bordado. De esta forma se puede usar como un porta cubre bocas N95, que han sido los recomendados por la Organización Mundial de la Salud, los artesanales pueden lavarse.

La demanda de cubre bocas en el mundo, obligo a la familia a innovar y empezar a diseñar estos objetos tan solicitados, las más jóvenes empezaron con los diseños que después se bordarían sobre telas de colores, hasta el momento cuentan con al menos 20 diseños diferentes.

Aurora, su esposo, sus hijos, viven en el ejido Arcotete desde hace once años, fueron de los primeros pobladores del lugar. El ejido cuenta con un parque ecológico y grutas abiertas al público. Esta área y todo el ejido es resguardado y cuidado por los integrantes de la comunidad organizados por usos y costumbres.

Aurora, su esposo, sus hijos, viven en el ejido Arcotete desde hace once años, fueron de los primeros pobladores del lugar. El ejido cuenta con un parque ecológico y grutas abiertas al público. Esta área y todo el ejido es resguardado y cuidado por los integrantes de la comunidad organizados por usos y costumbres.

El trabajo es detallado, como cada una de las artesanías en las que trabajaban cuando inicio el año. Cristina, una de las hermanas de Aurora, esta esperando a su primer hijo y también es parte del proyecto familiar, ella es una de las bordadoras.

Aurora y su hijo Noe, cuentan cuentos cubre bocas llevan, tienen que completar sesenta docenas lo antes posible, ella, desde hace unos días, despierta a las 5 de la mañana para coser, de nuevo, como lo hacía antes de que los turistas dejaran de visitar Chiapas, solo que ahora cose una tela blanca sobre rectángulos de telas de colores con sus bordados y sus colores.

La elección de las paletas de colores en cada uno de los cubre bocas es seleccionada la mayoría de las veces por Aurora.

Aurora, es quien se encarga de poner esta segunda tela y de la logística del negocio. Una de sus hijas quien también diseña se encarga de la venta de los productos a través de redes sociales.

Para poder venderlos a otros países, la familia López cose una segunda tela detrás del bordado. De esta forma se puede usar como un porta cubre bocas N95 que han sido los recomendados por la Organización Mundial de la Salud, los artesanales pueden lavarse.

La demanda de cubre bocas en el mundo, obligo a la familia a innovar y empezar a diseñar estos objetos tan solicitados, las más jóvenes empezaron con los diseños que después se bordarían sobre telas de colores, hasta el momento cuentan con al menos 20 diseños diferentes.

La mayoría de los integrantes de la familia coopera para terminar lo antes posible con los nuevos encargos que ahora tienen. Se acabo por completo la venta de artesanías en San Cristóbal de las Casas, donde regularmente las familias venden sus creaciones a los turistas.

La familia López Sántiz desde muy temprano inicia sus labores cotidianas, esta vez los despierta la idea de terminar docenas de cubre bocas para enviar a Cánada.